Atenas, la ciudad de los Dioses.

 Sucia y elegante a partes iguales. Atenas ofrece una curiosa mezcla de historia y originalidad.

La magnífica Acrópolis, visible desde cualquier parte de la capital griega, recuerda a diario a los atenienses su herencia y la gran transformación de la ciudad.


Llegamos a Atenas después de pasar 6 días en la Isla de Creta (clic para leer entrada).

ALOJAMIENTO: Nuestra intención era, básicamente, visitar la Acrópolis y dedicarle un día más a vivir el ambiente de la plaza Syntagma, del barrio de Plaka y los alrededores. Para este plan básico para conocer Atenas, es suficiente con uno o dos días. Hay muchas y variadas posibilidades de alojamiento por la zona. 
Nuestra elección fue el Cozy Flat in Heart of Acrópolis (enlace), un sencillo pero completo apartamento que quedaba bastante cerquita de todo lo que queríamos visitar. 2 noches con solo alojamiento nos costaron unos 150€, un precio medio-bajo en temporada alta.


AL LÍO! VISITA A LA ACRÓPOLIS

Conjunto monumental antiguo más importante del mundo occidental. Coronada por el Partenón, la Acrópolis se alza sobre Atenas llena de restos de monumentos y santuarios de mármol blanco.

Se suele recomendar que mejor ir a primera hora. Algo bastante complicado cuando se viaja con peques!! lo intentamos pero nos resultó misión imposible, teníamos que desayunar antes y los bares abrían a la misma hora que el acceso a la Acrópolis, así que decidimos tomárnoslo con calma.
Pasado el día, nos percatamos de que la opción de ir a última hora de la tarde hubiese sido el mejor plan. Sobre las 18:30 se veía poca gente (las masas de turismo llegan, sobre todo, con los cruceros y a esas horas ya se han ido) y, a no ser que seas un freaky de historia de arte, con hora y media es más que suficiente para hacer la visita. Cierran a las 20:00.


20€ es lo que cuesta la entrada a la Acrópolis. 
Existe también una entrada de 30€ para visitar, además las ágoras, la biblioteca de Adriano y el templo de Zeus.
Se puede reservar entrada por Internet con visitas guiadas en español en webs tipo Grecotour o Getyourguide. Típicas agencias con las que quedas con un guía por una entrada alternativa y evitas la cola. También tienen la opción de reservar entrada sin visita guiada por una comisión.

Si vas a visitar la Acrópolis con niños pequeños, tienes que saber que NO se permiten los carritos. Hay unos lugares habilitados para dejarlos que, por cierto, están fatal indicados y tienes que ir preguntando de lado a lado. Ahí mismo te dan la opción de alquilar un portabebé. Nosotros no lo cogimos porque ya leímos que la visita no es larga.

Hay un ascensor pero solo es para personas con sillas de ruedas y, aun así, me pareció que tienen muy limitada esta visita ya que el camino "adaptado" es bastante malo.

Recomendable llevar buen calzado ya que los senderos son irregulares y resbaladizos
Conforme vas subiendo, se ven unas bonitas vistas de Atenas.

UNAS PINCELADAS DE HISTORIA SOBRE LA ACRÓPOLIS:

En su origen, era una zona habitada y, en la Época Clásica, había otros monumentos que fueron destruidos en varias batallas por el ejército persa. 
Los principales monumentos que hoy pueden verse en la Acrópolis (Partenón, Atenea Niké, Propileos y Erection), pertenecen a la Edad de Oro de Atenas (480-404 a.C). En el año 480 a.C. Pericles lideró un larguísimo proceso de reconstrucción de la Acrópolis, por esto, esa época también se conoce como "El Siglo de Pericles".
En el s. VI fue cristianizada y a mitad del s. XVI islamizada.
En 1687, los venecianos destruyeron parcialmente el Partenón en un bombardeo.
Lo que hoy podemos ver en la Acrópolis (poquita cosa, la verdad... el viajero corre el riesgo de decepcionarse), es gracias a las restauraciones que se realizaron entre 1833 y 1863.
Propileos (a la izquierda) son las colosales puertas de acceso que, debido a la guerra del Peloponeso, nunca llegaron a terminarse. Templo de Atenea Nike (a la derecha), este está cerrado al público.

Tras pasar por Propileos, se alza él, El Partenón, con sus 70 metros de largo, sus columnas de más de 10 metros de altura y esa armonía perfecta en sus proporciones.

Templo dedicado a la veneración de la diosa Atenea. Tras la época griega, tuvo diferentes usos religiosos.





Las obras del templo dórico más importante de la historia, estuvieron supervisadas por Fidias. quien además fue autor de la decoración (estaba pintado de azul, rojo, verde y dorado). 
Las obras terminaron hacia el 432 a. C.

De los 128 metros originales del friso, se conserva un 94% de las esculturas y están repartidas entre el Museo de la Acrópolis y el British Museum de Londres.
Tras haber estado en el Museo de Londres, ya imaginaba que poco, o nada, iba a quedar de la decoración del Partenón, pero aun así hay que reconocer que, pese a los bombardeos, saqueos, abandonos... el Partenón ha sobrevivido dignamente al paso de tantos siglos.
El otro gran templo de la Acrópolis es el Erection, cuyo elemento más destacado es el Pórtico de las Cariátides, con 6 estatuas de mujeres haciendo de columnas (son réplicas, las originales pueden verse en el Museo de la Acrópolis).
Puedes visitar el MUSEO DE LA ACRÓPOLIS, ubicado a unos 300 metros al sur, por el módico precio de 5€ a 10€, para ello, lo mejor es visitar su web, ya que tanto los horarios como los precios varían en función de la época del año.

ALREDEDORES DE LA ACRÓPOLIS

Nos sorprendió la decadencia de la zona. Hay un paseo que bordea toda la Acrópolis con áreas en las que se acumula basura y zonas valladas totalmente abandonadas. 



BARRIO DE PLAKA

Se dice que el corazón de Atenas vive en Plaka, un barrio justo al lado de la Acrópolis que merece la pena visitar. Pintoresco y animado, sus calles son un imán para el turismo. La mayoría de ellas están cerradas al tráfico, lo cual se agradece porque es un placer darse un paseo por allí. Muchos restaurantes bonitos, joyerías, tiendecitas para turistas y un ambiente de lo más animado con música y actuaciones callejeras.


Si tienes poco tiempo para visitar Atenas, el consejo es que, tras la Acrópolis, vayas directamente a Plaka.

Licorería Brettos, la destilería más antigua de Atenas
Puerta de Adriano
Plaza de Mitrópolis



En la plaza más famosa del barrio de Plaka (Mitrópolis) se encuentra la Catedral mas importante de Atenas.


PLAZA SYNTAGMA

Epicentro de la vida ateniense. Nos acercamos por el ver edifico del Parlamento Griego, la tumba dedicada al Soldado Desconocido y el ambiente de la zona, que no tiene gran interés más allá del cambio de guardia.



Es un acto realizado por los ezvones (soldados) exagerado y suntuoso, me pareció como de otro siglo! Los cambios de guardia se realizan todos los días en las horas impares. Pero, si tienes ganas de presenciar un cambio de guardia aun más espectacular, lo ideal es que vayas en domingo (en torno a las 10:45) ya que ese día la ceremonia va amenizada por una gran banda musical.



ADIOS, GRECIA!! volveremos a conocer otras islas (probablemente sigamos por las Jónicas) y quizás destinos de interior tipo Meteora.


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