Rehabilitación vivienda de Magdalena y sus hijos

En nuestro primer día de trabajo en San Mateo perdimos el bus!! y no se nos ocurrió otra

 cosa que hacer autostop hasta que nos paró la policía... al final nos llevaron ellos (previo soborno). El ratico de risas subidos ahí detras arriesgando el tipo por las empinadísimas cuestas hacia la aldea, no tuvo precio!!

primera fase de la obra (la mejor), a derruir!!

tirar las paredes de adobe fue

un gran método anti estrés!

era como darte duchas de tierra

le debo la vida a mi prima Rosa que me insistió para que me llevara sus guantes de trabajo, yo no quería, pensaba q no me iban a hacer falta....

La casa que íbamos a construir estaba en lo alto de una super cuesta y todos los días teníamos que subir y bajar las herramientas.

siguiente fase de la obra: a desescombrar! (este día acabamos K.O., de hecho no hice casi fotos) 

Al día siguiente la cosa ya empezó a tomar forma, Mechu, nuestro jefe de obra, nos daba indicaciones para abrir las zanjas.

amenizados con el musicón de dj Silvia íbamos adelantando faena

Magdalena nos preparaba unos cafés de los de puchero riquísimos!

paleando

David y Ele compartiendo almuerzo

un día más...vuelta al proyecto!

Siguiente fase: encofrar. Toda una experiencia .

Rubén cortaba los hierros

Silvia les daba forma

María y Ana los sujetaban a los hierros grandes con alambre 

Andy y yo hacíamos bíceps ladrillos parriba ladrillos pabajo

y luego nos tocó hacer de hormigoneras humanas (menudas pintas saco en esta foto!) para hacer cemento fresco

luego se coloca todo y se llena de tierra todo excepto los hierros. Y así amigos es cómo se hace un encofrado en Guatemala jajaja

a destajooo

último día a la construcción... definitivamente fue lo más chulo del proyecto.

La cuesta que subía a casa de Magdalena era (además de una putada) preciosa! 

de los cables de la luz colgaban deportivas.. me vino la imagen de la peli Big Fish!!!

estas niñas subían agua hasta su casa.

todos los días pasábamos con las herramientas por esta lavandería tan maja

aquí las reinas del encofrao!

y hasta aquí nuestra colaboración en la obra...

al mes siguiente llegó otro grupo de voluntarios que continuaban con el trabajo.

gracias a Mechu por sus sonrisas de todos los días y sobre todo por su paciencia

los vecinos de la casa de al lado flipaban bastante con nosotros.

Al mes siguiente llegó otro grupo de voluntarios y acabaron de construir la casa de Magdalena:

ESPERAMOS QUE LA DISFRUTEN